El tráfico transnacional de cocaína y su vinculación con comunidades originarias en el norte de argentina 2010 – 2020

 

[Transnational cocaine trafficking and its link with indigenous communities in northern argentina 2010 - 2020]

 

[O tráfico transnacional de cocaína e suas ligações com as comunidades indígenas no norte da argentina 2010 – 2020]

 

Nelson David Aguilar

Universidad Nacional de Salta. Facultad de Humanidades. Escuela de Historia.

Email: nelsondavid824@gmail.com

 

Resumen: América Latina, a finales del siglo XX y principios del XXI, se ha convertido en un epicentro del tráfico de drogas, tal como lo afirma la UNODC[1], especialmente cocaína y pasta base, debido a la pobreza, desigualdad y marginalidad que se acentúan en sus zonas de frontera. La provincia de Salta, en el norte de Argentina, ha dejado de ser considerada un país de tránsito y se ha convertido en un punto clave del tráfico de drogas a nivel global.  Este fenómeno se ha visto impulsado por la participación de nuevos actores sociales, incluidas las comunidades indígenas Wichí, quienes se han integrado al circuito de tráfico y han experimentado un aumento en el consumo de drogas duras. Este trabajo analiza la integración de las comunidades originarias Wichi al micro y macro tráfico de drogas, y al consumo de cocaína y sus derivados en la frontera norte de Salta durante las primeras dos décadas del siglo XXI.

 

Abstract: Latin America, particularly in the late 20th and early 21st centuries, has become a central hub for drug trafficking, as confirmed by the UNODC, especially for cocaine and crack cocaine. This is driven by poverty, inequality, and marginalization, which are particularly acute in border regions. Salta Province, in northern Argentina, has transitioned from a transit country to a key point in the global drug trafficking network. This phenomenon has been fueled by the involvement of new social actors, including the Wichi indigenous communities, who have become integrated into the drug trafficking circuit and have experienced an increase in the consumption of hard drugs. This research analyzes the integration of the Wichi indigenous communities into micro and macro drug trafficking, as well as the consumption of cocaine and its derivatives in the northern border of Salta during the first two decades of the 21st century.

 

Resumo: A América Latina, no final do século XX e início do século XXI, tornou -se um epicentro do tráfico de drogas, conforme declarado pelo UNODC, especialmente cocaína e pasta de base, devido à pobreza, desigualdade e marginalidade que são acentuadas em suas áreas de fronteira. A província de Salta, no norte da Argentina, deixou de ser considerada um país de trânsito e se tornou um ponto -chave do tráfico de drogas em todo o mundo.  Esse fenômeno foi promovido pela participação de novos atores sociais, incluindo as comunidades indígenas de Wichi, que se integraram ao circuito de tráfego e experimentaram um aumento no uso de medicamentos. Este trabalho analisa a integração das comunidades originais de Wichi ao tráfico de micro e macro medicamentos, e o consumo de cocaína e seus derivados na fronteira norte de Salta durante as duas primeiras décadas do século XXI.

Palabras Claves: Crimen organizado, cocaína, comunidades originarias.

Keywords: Organized crime, cocaine, native communities

Palavras-chave: Crime organizado, cocaína, comunidades originais.

 

Introducción

 

El presente trabajo emplea para su metodología de análisis, el estudio de caso, el cual refiere a la vinculación que tiene la criminalidad organizada transnacional de tráfico de cocaína y sus derivados y la integración a sus lógicas de funcionamiento de comunidades originarias Wichi.

Es importante identificar que estas vinculaciones se materializan en el tráfico macro y micro de productos ilícitos (cocaína y pasta base), así como también en las diferentes pautas de consumo de dichas sustancias que devienen del tránsito de estupefacientes en la región, por lo que el objetivo central del presente, refiere a indagar sobre los mecanismos y herramientas que emplean los agentes criminales para integrar en el tráfico a las comunidades originarias del norte de Salta.

Argentina inició su proceso de integración en el mapa del narcotráfico con los denominados “Carteles de la Droga[2]” durante el último cuarto del siglo XX. Durante estos años, la apertura de nuevas rutas de tráfico marcó el accionar de dichas organizaciones criminales, debido a que, el contexto propio[3] obligaba a buscar alternativas para abastecer mercados internacionales en Europa (España, Francia y Países Bajos), Asia (Japón y China) e incluso África (Sudáfrica).

Los delitos vinculados al tráfico de drogas por parte de organizaciones criminales transnacionales afectan ampliamente el conjunto de la sociedad dentro de la cual accionan, generando una serie de crímenes predatorios y disruptivos, sobre todo aquellos vinculados al consumo y adicciones. Factores de pobreza, desigualdad y violencia localizados en diferentes espacios de frontera del continente facilitan el asentamiento de dichas redes de criminalidad organizada, afectando el tejido social, económico y cultural de las sociedades receptoras.

El norte de Argentina se propicia como una región fértil para el desarrollo de actividades ilícitas, debido a que, conforma un espacio de frontera permeable[4] con Bolivia y Paraguay, sin un control efectivo por parte de las autoridades estatales. La existencia de poderes locales narco criminales vinculados a autoridades políticas municipales y de la administración provincial y/o nacional[5] evidencia la complicidad existente entre actores y da cuenta de mecanismos aceitados de funcionamiento de la maquinaria delictiva[6].

Crimen organizado y tráfico trasnacional en el norte argentino

La frontera norte de Argentina se presenta como un espacio de profunda dinamización en lo que respecta a movimientos de población y circulación de bienes de uso cotidiano. Su cercanía con países limítrofes, Bolivia y Paraguay[7], favorece los intercambios comerciales, así como también el contrabando.

Estas situaciones se vieron acentuadas a comienzos del siglo XX, en donde la crisis económica argentina del año 2001 empujó a muchos sectores de la población a buscar alternativas económicas para subsistir, siendo una de ellas el ingreso a la criminalidad organizada en sus diversos tipificaciones[8].

En el departamento de General José de San Martín recae el grueso de la actividad criminal organizada vinculada al tráfico de diferentes tipos de productos ilícitos, aquí el desarrollo del comercio informal tiene una alta incidencia llegando a abarcar cerca del 40 % de la actividad económica y comercial[9].

La circulación tanto de personas, como de bienes en la zona en cuestión, responde a diferentes variables entre las que podemos señalar geográficas, socioculturales, económicas y políticas.  Así, la movilidad poblacional local y extra local permite identificar migraciones laborales, de comercio, de turismo y movimientos ilegales de bienes y personas.

Los espacios fronterizos presentan altos índices de vulnerabilidad frente al tráfico de drogas y el contrabando, tal como es el caso en estudio[10]. La localidad de Salvador Mazza (Departamento General José de San Martín), la cual limita con la Ciudad de Yacuiba, Bolivia, cuenta con altos índices de criminalidad organizada, siendo el tráfico de cocaína, la predominante.

Es de vital importancia identificar y caracterizar los tipos de tráfico de drogas ilícitas, debido a que esta, delimita las metodologías de accionar de la organización y su composición. En primera instancia, se encuentra el micro tráfico el cual se señala como “el tráfico ilícito de drogas que se realiza con la exclusiva finalidad de satisfacer demandas de los consumidores locales[11]”; Por el contrario, el macro tráfico se vincula “al tráfico de drogas cuya operatoria está caracterizada por el ingreso de estupefacientes a la Provincia con el objeto de ser transportado hacia afuera de los límites provinciales, con destino a otras jurisdicciones  o los distintos puntos de salida para su posterior envió al exterior del país, particularmente Europa y el Norte de África[12]”.

Se observa con ello, que la orientación del tráfico de la organización criminal define su lógica de funcionamiento y da cuenta de su organización interna. Una organización que se dedica a proveer mercados transnacionales requiere una mayor logística y recursos para transportar dichos productos, al tiempo que intervienen una mayor cantidad de actores para llevar adelante la empresa. Su contrapartida es el micro tráfico, el cual requiere organizaciones de menores porte, con menores recursos y recursos humanos mínimos indispensables para abastecer mercados locales[13].

En consonancia con esta distinción, tenemos que señalar otra característica que determina la orientación y/o capacidad de las redes de crimen. Esta tiene que ver con la calidad del producto a traficar; orientándose al tráfico transnacional el clorhidrato de cocaína de máxima pureza, es decir, el producto con un mayor poder de refinamiento. En contraposición con los mercados locales de consumo de estupefacientes donde predomina el uso de productos de menor calidad entre los que se ubican la pasta base de cocaína (paco).

La integración del noroeste argentino a las lógicas de circulación del tráfico transnacional de Cocaína y Pasta Base, manifiesta una doble combinación, donde se evidencian organizaciones orientadas a abastecer mercados europeos, africanos y asiáticos, y organizaciones destinadas a comercializar productos ilícitos en mercados locales en menor medida.

Criminalidad organizada y comunidades originarias

Durante las dos primeras décadas del siglo XXI, diferentes problemáticas vinculadas al tráfico de Cocaína fueron introduciéndose en las comunidades originarias Wichi[14] del norte de Salta. Dichas comunidades se encuentran habitando el espacio con intermitencia[15] en los actuales territorios del noreste de Argentina, sureste de Bolivia y sur de Paraguay, en el marco de una frontera permeable.

Estos territorios, para el caso argentino, están integrados por los departamentos de General San Martín, Rivadavia y Orán pertenecientes a la provincia de Salta, el departamento de General Güemes integrado a la jurisdicción de Chaco y los departamentos de Bermejo, Matacos, Patiño y Ramón Lista que forman parte de la provincia de Formosa.

La siguiente referencia geográfica permite ilustrar la ocupación del territorio en cuestión por parte de comunidades originarias Wichi.

FIGURA 1. Distribución del pueblo Wichí en el actual Noroeste argentino

Fuente: Ossola, Macarena (2017) Distribución del pueblo Wichi en el territorio argentino. p.58.

 

Las organizaciones criminales predominantes que se vinculan a dichas comunidades en la región, son aquellas orientadas al micro tráfico sobre todo impulsando la venta minorista bajo diversas modalidades. Para ello emplean una metodología de captación de adolescentes y jóvenes de barrios y/o zonas marginales. Como se mencionó precedentemente, la falta de oportunidades educativas y laborales afectan fundamentalmente a este sector poblacional, los cuales al integrarse en la criminalidad organizada adquieren ingresos y recursos monetarios inmediatos, reconocimiento social entre pares y dentro del ámbito de la criminalidad.

Bajo esta modalidad de microtráfico, las redes de criminalidad suministran pequeñas cantidades del producto fraccionado, los cuales se van distribuyendo y comercializando en dosis individuales. Este tráfico es el encargado de satisfacer las necesidades de los consumidores de paco y demás derivados de forma personal, comercializados en puntos de venta específicos y conocidos por los consumidores.

Esta modalidad presenta, también, tres aspectos determinantes:

                 El primero se refiere al punto de venta, es decir, al lugar en el que se realiza la transacción comercial de pequeñas cantidades.

                 En segunda instancia, la monetización, el momento en el que las drogas ilícitas son intercambiadas por dinero o de manera excepcional por algunos bienes y servicios.

                 Por último, el consumo que es una actividad interdependiente con el sistema del tráfico de drogas, tiene como propósito darle utilidad al producto comprado del cual los usuarios esperan un efecto para satisfacer una necesidad según el estado de adicción o dependencia.

Es de vital importancia, señalar que el tráfico en pequeñas dimensiones para consumo local de paco o cocaína es efecto directo del paso de dicho producto en grandes cantidades, por lo que es una condición complementaria. El micro tráfico o también denominado “narcomenudeo” se constituye como un componente necesario de este mercado ilícito, ya que, se configura como el nexo entre las cadenas de distribución y los consumidores.

Autoridades oficiales del estado y caciques comunales reconocen las actividades ilícitas del tráfico que se ejercen en la zona[16], sin embargo, son pocas las herramientas que tienen para enfrentarlo[17]. La implementación de talleres y conversatorios con las familias residentes en el lugar ha proliferado como una estrategia preventiva para afrontar dicha problemática, asimismo, la vinculación de diferentes organismos, organizaciones e instituciones se erigen como herramientas para fortalecer la cooperación en materia de abordaje efectivo[18].La influencia del mismo se inserta de lleno en el seno de las comunidades afectando a estratos poblacionales adolescentes y jóvenes[19]. Los testimonios de integrantes de las comunidades son explícitos[20]:

los pueblos originarios no quedan afuera de esta grave problemática que es el consumo de sustancias prohibidas y del alcohol, que hace mucho daño a las comunidades. Por eso piden la asistencia de áreas del estado, porque la mejor manera de abordar el consumo es trabajar en redes, con familias, instituciones y sus representantes, porque el consumo de sustancias prohibidas afecta a toda la sociedad.[21]

Artículos periodísticos evidencian está situación y señalan a la organización comunitaria como una estrategia para abordar dicha problemática; la apertura hacia el acceso a los resortes de la justicia en los últimos años es una herramienta para la lucha contra este flagelo[22]. La materialización de los pedidos de detención y posterior enjuiciamiento de originarios/as que participan en el micro tráfico de estupefacientes al interior de las comunidades[23] se plantea como un paso hacia adelante.

El paco resulta ser una de las principales sustancias psicoactivas consumidas en la provincia de Salta, tanto en ámbitos urbanos como periurbanos y/o rurales afectando, en este caso, a comunidades originarias Wichi. Su consumo trae aparejado diferentes perjuicios que afectan la salud de los consumidores[24].

Los daños al organismo que presenta son diversos; a nivel físico, su impacto es extenso, afectando al sistemas nerviosos (confusión, excitación, daños a nivel psicomotriz, delirios, paranoia y depresión en el sistema nervioso central), respiratorio (lesiones en la vía oral, irritación en las mucosas, neumonía, enfisema pulmonar, cáncer), circulatorio (hipertensión, arritmia, infarto y taquicardia) y digestivo (pérdida de piezas dentarias, cáncer de estómago, desnutrición, diarreas y vómitos); y en casos extremos, el deceso / muerte[25].

También genera cambios en el comportamiento estimulando conductas orientadas al delito, como son, por ejemplo, los robos, asesinatos, peleas y autolesiones o acciones autodestructivas nocivas para la integridad física. El testimonio de uno de los referentes de la Comunidad Wichi explícita:

Mi hijo tiene 15 años, me roba lo que encuentra a mano, cualquier cosa, con tal de tener plata para comprar droga. Me presiona todo el tiempo para que le dé dinero y como no le quiero dar me amenaza con que me va a matar apenas cumpla los 18 años[26]”.

La principal manifestación en el comportamiento de la persona con problemas de consumo es la violencia con graves peligros para la integridad física propia y la del núcleo familiar, la cual se traslada al entorno social próximo. En segunda instancia, los robos representan una sintomatología de la adicción, debido a que, la  necesidad por satisfacer el efecto de abstinencia por consumir los lleva a delinquir con el objetivo de obtener recursos económicos para continuar con el ciclo[27].

Ex integrantes del poder judicial de la nación, como lo fue el ex Juez Federal Raúl Reynoso declaraba que no solo se encuentra preocupado por el tránsito de la droga que pasa hacia Buenos Aires, sino por la que dejan en el camino. Hay miles de chicos con adicciones que consiguen un gramo de cocaína o paco fácilmente. Constantemente me visitan Madres del Dolor en busca de una solución eficaz para este flagelo[28].

Las dimensiones que adquiere el micro tráfico de paco o cocaína denominado narcomenudeo en el norte de Salta es altamente preocupante y evidencian las falencias y debilidades de instituciones oficiales y de la sociedad civil al momento de diseñar políticas públicas que aborden la problemática en cuestión.

Conclusiones

En las últimas décadas, Argentina ha presentado una evolución en lo que respecta a su rol dentro del mapa transnacional de tráfico de cocaína y sus derivados, y ello se evidencia en el paso de un mercado de tránsito a un mercado de consumo favorecido por las condiciones socio – económicas de pobreza y marginalidad de la región.

La influencia de esto se materializa en la integración a las lógicas de la criminalidad organizada de tráfico de drogas – cocaína y pasta base – de comunidades originarias Wichi, las cuales encuentran al interior de sus comunidades, miembros dedicados a la venta de estupefacientes cooptados por diversas organizaciones. El libre accionar de la criminalidad visibiliza la complicidad por parte de los resortes del estado con los delincuentes.

La venta de estupefacientes al interior de las comunidades originarias revela los lazos profundos entre estos actores y el entorno dentro del cual accionan, al mismo tiempo que dan cuenta de una estructura mínima requerida por el tráfico de cocaína para la comercialización de sus productos. Estos factores se corresponden con las características físicas y medioambientales de la región, la falta de controles, escasez de personal estatal dedicado al control efectivo de la frontera y la proliferación de todo tipo de actividades ilícitas.

El narcotráfico y las problemáticas que derivan de su existencia, en este caso el consumo de estupefacientes dentro de comunidades originarias Wichi, pone en relieve la falta del desarrollo de política públicas por parte de los estados municipales, provinciales y nacionales, así como la incapacidad de implementar estrategias paliativas tendientes a reducir su impacto en la sociedad de referencia.

Los registros mencionados permiten visualizar la estrategia principal empleada para la captación de jóvenes y adolescentes con los fines de introducir estupefacientes al interior de comunidades originarias. Esta consiste en atraerlos mediante una compensación económica relevante y con legitimidad y reconocimiento social en el ámbito delincuencial. Así, inicia un proceso de articulación de ese tipo de tráfico en donde intervienen algunos aspectos fundamentales. Primero, el establecimiento del lugar en donde se va a expedir la venta del producto, es decir las bocas de expendio, que generalmente son espacios fijos conocidos por los compradores y consumidores; espacios sobre todo de socialización comunitaria y con acceso a los estratos más juveniles de las comunidades. Dichos lugares son apropiados de una u otra manera por los narcos criminales, los cuales los colocan bajo la dirección de un traficante quien es el que abastece de productos. Aquí desempeñan actividades como vendedores jóvenes o adolescentes que no alcanzan la mayoría de edad, los cuales tienen menos prejuicios legales en el caso de ser detenidos por las autoridades oficiales (esta metodología se repite constantemente independientemente del espacio regional en donde se produzca el establecimiento de una boca de expendio). Alrededor de este búnker algunos jóvenes, adolescentes y jóvenes adultos transitan y deambulan por el lugar actuando en calidad de soldados y/o campanas avisando en todo momento si llegara a realizarse algún operativo oficial. Las personas que realizan este tipo de ventas lo hacen de manera pública y son reconocidos dentro de los círculos sociales próximos a la familia, vecinos, barriada, etc.

En segunda instancia, se realiza el intercambio que involucra a un proveedor y un comprador en donde se hace efectivo la monetización de la transacción o se troca el producto por algún bien con valor. Es de vital importancia señalar que la venta minorista no discrimina clase social, estatus o profesión del consumidor. En tercera instancia, tiene lugar la utilización del producto adquirido, es decir, el consumo de dicha sustancia y la consecuente satisfacción de las necesidades que la misma genera dentro del organismo.

El narcotráfico extiende sus influencias cada vez más sobre sectores poblacionales a los cuales anteriormente no tenía dentro de sus lógicas de funcionamiento. La velocidad con la que acciona y la facilidad que tiene para penetrar en todos los estratos de la sociedad lo plantea como una problemática altamente nociva para las sociedades marginales y de frontera en donde los recursos y herramientas del estado son escasas y endebles.



[1] Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.

[2] Jorge Alejandro Valdez Vázquez, “RTC, más que crimen organizado, cárteles o narcotráfico”, Secuencia no. 111 (septiembre-diciembre 2021), https://doi.org/10.18234/secuencia.v0i111.1799.

[3] Durante la década de 1980 y 1990, los carteles de la droga de Medellín y Cali, llevaron adelante un enfrentamiento con el Estado de Colombia lo que llevó a la desestructuración y reestructuración de rutas de tráfico.

[4] Alejandro Grimson, “Introducción: ¿Fronteras políticas y. fronteras culturales?”, en Fronteras, naciones e identidades. La periferia como centro, compilado por Alejandro Grimson, 9-40 (Buenos Aires: La Crujía, 2000).

[5] Ministerio Publico Fiscal de la Provincia de Salta,  “Salta: 18 años de prisión para un gendarme por tráfico de cocaína”, (28 de septiembre de 2018). https://www.fiscales.gob.ar/fiscalias/salta-18-anos-de-prision-para-un-gendarme-por-trafico-de-cocaina/

[6] Ministerio Publico Fiscal de la Provincia de Salta, “Condenaron a trece años de prisión al ex juez federal de Orán Raúl Reynoso”, (26 de marzo de 2019). https://www.fiscales.gob.ar/narcocriminalidad/condenaron-a-trece-anos-de-prision-al-ex-juez-federal-de-oran-raul-reynoso/

[7] Gastón Gordillo y Juan Martín Leguizamón, El río y la frontera. Movilizaciones aborígenes, obras públicas y Mercosur en el Pilcomayo (Buenos Aires: Editorial Biblos, 2002).

[8] Santiago De All, “Historia del microtráfico de drogas ilícitas en Argentina 2001 – 2019: Crisis, autonomía, regulación e institucionalización” (Tesis de grado, Universidad Torcuato Di Tella, 2023)

[9] León Lizárraga y Lucía Ferreira, “El contrabando vinculado al comercio informal de mercaderías en el noroeste argentino y su relación con el desarrollo económico”, Delito y Sociedad 48 (2019), año 28, 2° Semestre.

[10] Diario El Tribuno, “Frontera Caliente: el engranaje del contrabando en el norte salteño” (09 de noviembre La importancia de ferias locales de pequeños productores de la feria de la Quebrada de Escoipe, departamento de Chicoana Salta2014). https://www.eltribuno.com/salta/nota/2014-11-9-1-15-0-frontera-caliente-el-engranaje-del-contrabando-en-el-norte-salteno-frontera-caliente-aguas-blancas-oran

[11] Gobierno de la Provincia de Salta, “Primer estudio de diagnóstico sobre Narcotráfico en la Provincia de Salta”, Edit. El Mundo – Grafico (2011), 35.

[12] “Primer estudio de diagnóstico, 35.

[13] “Primer estudio de diagnóstico, 49.

[14] Diario El Tribuno, “El consumo de drogas crece entre aborígenes” (11 de septiembre de 2016). https://www.eltribuno.com/nota/2016-9-11-1-30-0-el-consumo-de-drogas-crece-entre-aborigenes

[15] Macarena Ossola, “Usos y re significaciones de las lenguas Wichi y español entre jóvenes universitarios bilingües (Salta Argentina)”, en Cuadernos de Antropología Social no 47 (2017), 58.

[16]Gobierno de Salta, “Asuntos indígenas fortalece la prevención de adicciones en Pueblos Originarios” (15 de julio de 2022). https://www.salta.gob.ar/prensa/noticias/asuntos-indigenas-fortalece-la-prevencion-de-adicciones-en-pueblos-originarios-83650

[17] Diario El Tribuno, “El consumo de drogas crece entre aborígenes” (11 de septiembre de 2016). https://www.eltribuno.com/nota/2016-9-11-1-30-0-el-consumo-de-drogas-crece-entre-aborigenes

[18] Gobierno de Salta, “Fortalecen la lucha contra el narcotráfico en comunidades originarias” (20 de Julio de 2017). https://www.salta.gob.ar/prensa/noticias/fortalecen-la-lucha-contra-el-narcotrafico-en-comunidades-originarias-53622

[19] Nelson Aguilar. “Crimen organizado trasnacional y comunidades originarias: El caso de las comunidades Wichi del Norte de Salta en el siglo XXI” (ponencia presentada en III Jornadas Interdisciplinarias de Estudios y Prácticas Andinas y I Jornadas de Prácticas Interculturales del Norte de Salta: Oran – Tartagal.  Universidad Nacional de Salta, Oran – Salta, 2016).

[20] Diario La Nación, “Caciques se movilizan en Salta contra el consumo de Paco en sus pueblos” (09 de octubre de 2016). https://www.lanacion.com.ar/seguridad/caciques-se-movilizan-en-salta-contra-el-consumo-de-paco-en-sus-pueblos-nid1945392/

[21] Secretario de Asuntos Indígenas, Luis Gómez Almarás.

[22] Ministerio Publico Fiscal de la Provincia de Salta, “El Procurador participó de la entrega de certificados de la Diplomatura de Extensión en Interpretación y Traducción Intercultural Wichi Castellano para el acceso a la Justicia” (07 de mayo de 2024) https://www.fiscalespenalesalta.gob.ar/el-procurador-participo-de-la-entrega-de-certificados-de-la-diplomatura-de-extension-en-interpretacion-y-traduccion-intercultural-wichi-castellano-para-el-acceso-a-la-justicia/

[23] Ministerio Publico Fiscal de la Provincia de Salta, “Piden detener a una mujer acusada de vender droga a jóvenes de una comunidad Wichi”. (26 de septiembre de 2016). https://www.fiscalespenalesalta.gob.ar/piden-detener-a-una-mujer-acusada-de-vender-droga-a-jovenes-de-una-comunidad-wichi/

[24] Agustín Salvia (coord.), “Aumento del tráfico de drogas en los barrios, problemas de adicciones severas en las familias y poblaciones de riesgo” (Informe del Barómetro del Narcotráfico y las Adicciones en la Argentina, Serie del Bicentenario [2010-2016], 2015), 1, disponible en https://repositorio.uca.edu.ar/handle/123456789/8294.

[25] Infórmate Salta, “Drogas, trata y violencia: los dramáticos efectos del narcotráfico en las comunidades originarias” (18 de diciembre de 2024).

https://informatesalta.com.ar/contenido/414758/comunidades-originarias-victimas-de-las-drogas-allanamientos-y-secuestros-a-gran

[26] Diario El Tribuno, “El consumo de drogas crece entre aborígenes” (11 de septiembre de 2016). https://www.eltribuno.com/nota/2016-9-11-1-30-0-el-consumo-de-drogas-crece-entre-aborigenes

[27] Diario La Nación, “Caciques se movilizan en Salta contra el consumo de Paco en sus pueblos” (09 de octubre de 2016). https://www.lanacion.com.ar/seguridad/caciques-se-movilizan-en-salta-contra-el-consumo-de-paco-en-sus-pueblos-nid1945392/

[28] Diario Clarín, “Los narcos se infiltran entre los bagayeros del norte argentino” (22 de febrero de 2022).https://www.clarin.com/sociedad/narcos-infiltran-bagayeros-norte-argentino_0_ryBZsD1swXg.html?srsltid=AfmBOop3wfns3xqgRRsN78IQgAG67sLeCuIHxR6gkMgb9j0de4iMTdx